Tocando el Cielo

Corría el mes de agosto del 2009, estaba en un Hospital de la ciudad condal, y de charla con mi compi Alejandro, cuando de pronto la vimos entrar; acompañaba a su padre que había sufrido una insuficiencia respiratoria y el tema no pintaba muy bien. Ella, Eva de nombre, una mujer esbelta, de aparente buenos modales, tenía el rostro con signos de preocupación, tanto mi compi como yo, nos fijamos en ella, emanaba un aura de ternura que ambos nos quedamos por así decirlo…abducidos.
La noche transcurría, el ambiente se empezaba a ponerse movidito, teníamos una mujer bajita y rechoncha de raza gitana con claros signos de tener algún problema que otro de orden psicológico, esta mujer parecía un poquito fuera de sí, tenía el don de hacernos reír y de reírnos de ella por sus comentarios de tipo sexual que decía, estábamos de alguna manera divirtiéndonos cuando vimos de ese rostro triste esbozar una sonrisa, era esa típica sonrisa de pedir….por favor estoy hundida moralmente, venir a salvarme. Nosotros lo vimos claro y por supuesto que tiramos para adelante con sus consecuencias, no dudamos ni un instante en ponernos manos a la obra y en cierto sentido pavonearnos delante de ella para que se diera cuenta que éramos lobos en busca de ovejas, teníamos claro que las posibilidades eran mínimas, pero aún así debíamos intentarlo. Según pasaba el tiempo, íbamos cogiendo confianza, la noche prometía, tuve la ocasión de averiguar a qué se dedicaba y como no, es entrenadora personal de un gimnasio importante de la ciudad, me entregó una tarjeta con su móvil personal al dorso, eso me dejó un poco fuera de sitio, mi mente iba muy deprisa y me hacía pensar por un lado que ella podría haberse fijado en mí, pero por otro lado también pensaba que solo eran ganas mías y que mejor dejase de pensar en cosas imposibles.
Al día siguiente la llamé con la excusa de que había visitado la pagina web del gym pero tonto de mí, me quedé con las ganas porque ni me cogió el teléfono ni claro está me devolvió la llamada, todas esas esperanzas que tenía de la noche anterior se había difuminado de un plumazo. Pasado un par de días, mi mente seguía en efecto pensando en esa mujer misteriosa, intentaba descifrar cuál era el motivo que me empujaba a seguir intentando conseguir a cualquier precio una cita con ella e intentar profundizar en su ser, cuando un amigo de nombre Jordi, me empezó animar para k lo intentase, para k le mandase ese mje tan deseoso para mí pero a la vez tan temido debido a la incertidumbre de la respuesta, no obstante tardó unos 30 minutos en responder, recuerdo k fueron minutos agónicos y desesperantes pero conseguí arrancarla esa cita tan deseada……….



Llegó el día 22, llegó ese momento k tanto esperaba, creo k fue una de las noches más maravillosas de mi vida, como disfruté de aquella velada, fue de los más distendida incluso en su inicio, nos fuimos a cenar a un restaurante de la ciudad condal, uno ubicado en la zona de Sant Andreu llamado All i Oli, restaurante típico de masía catalana pero ubicado en plena ciudad….. Allí empezamos a conocernos un poco y por supuesto inicié mi carrera fotográfica con ella, me encantaba porque se ponía nerviosa de tantas fotos k le hacía, incluso el camarero muy amablemente nos hizo fotos a ambos juntos, menuda diferencia jejejeje pareceríamos la bella y la bestia pero aun así las risas no faltaron. 
Tras nuestra cena y durante un paseo en moto, tuvimos alguna escena graciosa y curiosa con una mujer de la calle k nos sirvió un poco para soltar esa timidez inicial…seguimos ruta y quien lo dirá por hacerme caso de una mujer casi nos aguan la fiesta la Policía Urbana y nos multa por hacer un pequeña imprudencia pero hasta en eso tuvimos suerte y quedo en una mera advertencia. 
Transcurrido esto, a ella le apetecía pasear por las Ramblas, el recorrido fue divertido, en cierto sentido nos reíamos un poco de las personas que por allí circulaban, fuimos entrando en bares a tomar un tequila que otro (había k verle la cara cada vez k tomaba uno jejejeje)…después de nuestro paseo, decidimos sentarnos en un banco de la plaza de Catalunya donde nos pasamos las horas hablando, acariciándola incluso besándola dulcemente con ese cariño especial que a una mujer le hace falta y necesita, con todo ello, intente transmitirle todos mis sentimientos a través de esas caricias, abrazos y besos, creo k es cierto sentido conseguí transmitírselos. 
Estuvimos allí casi hasta el amanecer para irnos a la playa para verlo en directo, que bonito ese instante al lado de una persona por la que sientes algo especial, que afloran nuevas sensaciones. Desde ese preciso instante, tu vida empieza un sueño del que no quisieras despertar jamás. 
Tras nuestro amanecer decidimos ir a un pequeño bar pero muy pero muy coqueto en el que desayunamos un poco, se nos veía la cara de cansados de estar toda la noche sin dormir, con algún chupito de más, pero a la vez la de satisfacción de haber disfrutado a tope de una velada maravillosa y completa. 
Llegada la hora de la despedida, llegada esa hora fatídica y del dolor, de ese vacío inmenso, de la sensación k uno nunca desea sentir k no es otra k la de la soledad más absoluta…mi corazón se encogía, los nervios envolvían mi cuerpo, no quería k el tiempo se acabara pero era algo k no podíamos frenar. Al final solo quedaba nuestro abrazo intenso, era como si nos hubiesen unido y no pudiéramos despegarnos, separarnos, esa mirada suya y la mía se cruzaron, y hablaron por si solas.
Pasado todo este inicio tan gratificante, tan esplendoroso, nuestra vida se fue intensificando, no nos veíamos cada día por motivos de trabajo y demás, pero eso sí existían cientos de sms de verdadero entusiasmo junto a horas interminables de llamadas de teléfono, era casi como si no estuviésemos separados, era como tenerla a mi lado las 24 h al día, me sentía como en un paseo por las nubes. 

Todo este tiempo hemos compartido muchas vivencias, muchas inquietudes creadas alrededor de nuestra vida y nos hemos apoyado mutuamente. Creo haber aprendido amar hasta un límite insospechado, nunca he podido imaginar que podría emanar de mi tanto amor por alguien. 
Queda en mi grato recuerdo el haber conocido también a su hija, con la que he pasado momentos gratos y además con mi hijo había empezado a congeniar y llevarse muy bien los dos, hasta eso parecía perfecto, creo que siempre se nos quedará grabado a Eva y a mí, una noche en la playa de Montgat viendo los clásicos monólogos que hacen allí durante el verano, el ver a su hija y a mi hijo sentados en la orilla del mar y con la luna en su fondo, ella y yo nos miramos y dijo: que romántica imagen verlos como si fuesen una pareja de enamorados, la verdad es que parecían un postal, fue una imagen de impacto de las que no se olvidan.
Todo este tiempo han sido momentos de felicidad, de comprensión, de unión y de compartirlo todo, sin mentiras, sin tapujos y con toda naturalidad, pero no hay nada que dure para siempre, así está estipulado en las leyes universales, así está escrito en mi aura, felicidad la justa sin excesos y es lo que me marca para siempre. La vida trae estas cosas de la inmensidad de la felicidad a la mayor de las tristezas, es un cambio brusco, todos eso sentimientos se ahogan en inmensos baños de lagrimas, tu cuerpo pierde la fuerza necesaria para seguir luchando y no perder el paso, todas las vivencias se mueren en tu interior, te envuelve ese vacío tan enorme y pesado, ese dolor tan desesperante, y sobre todo la impotencia creada cuando llegado el día fatídico, sin saber porque, la vida te da un giro que ni imaginabas porque siempre piensas que a ti no te va a suceder nunca, cuando llega ese instante te ves perdido, todo a tu alrededor se derrumba sin poder hacer nada, cada paso que intentas dar para levantar, aun es peor porque incrementas aun más si cabe el derrumbamiento y se vuelve en tu contra, ya no hay manera humana de entender porque pasan estas cosas, porque hay que sufrir en esta vida cuando uno piensa más que nunca que todo es perfecto.
Que sentimiento más duro el perder a un ser querido, para mí por suerte no se me ha ido ninguna persona de mi familia cercana, llámese padres, hermanos, esposa e hijos, pero si sé lo que han sentido otros al perder a ese tipo de personas cercanas a su propia vida, ahora sí, ahora… ya sé lo k se siente cuando se te arranca de tu vida y de un plumazo a la persona que amas, es como cuando una persona querida te despides de él por la noche y al otro día ya no está entre nosotros, se ha ido para siempre y ya no volverá jamás, esto es lo que queda, su recuerdo y un inmenso vacío en tu interior.
Para ti Eva que te fuiste de mi lado, decirte que el tiempo amansa el dolor pero no el olvido, te llevaste una parte importante de mi corazón y por ello espero que me recuerdes amándote, mirándote a los ojos e intentando atarme a tu vida porque mi alma ya fue tatuada en tu piel para siempre.